Una campaña que pretende cambiar la manera de asistir a los conciertos de música coral en nuestro país, que en su mayoría son de libre entrada, y concienciar al público de la importancia de empezar a mostrar el valor que tiene lo que han presenciado, mediante una aportación económica.
Se trata de cambiar el concepto de libre entrada por el de libre aportación: contribuir libremente, en la medida en que a cada uno le haya gustado el espectáculo, para que la actividad cultural pueda continuar desarrollándose.